El Gran Premio Junior Bike 2023 celebró su sexta edición, motivando a niños y jóvenes a practicar ciclismo de manera organizada.
Por Óscar Martínez Corona
El municipio de Soledad de Graciano Sánchez y los parques Tangamanga 1 y 2 fueron los escenarios elegidos para que más de 400 competidores, con edades entre los 2 y los 15 años que vienen desde diferentes estados del país, se divirtieran compitiendo en su deporte favorito.
ETAPA 1: Soledad de Graciano Sánchez
La primera etapa tuvo lugar en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, en un circuito urbano de 2,310 metros.
Este escenario rápido, con dos rectas de aproximadamente un kilómetro, fue la pista ideal para que las distintas categorías mostraran su destreza y velocidad. El ambiente fue cálido, con el apoyo de familias y habitantes de la comunidad que vitoreaban y animaban a los competidores en cada vuelta.
ETAPA 2: Parque Tangamanga 1
La segunda jornada se realizó en el parque Tangamanga 1, un lugar que se renueva año tras año y que ahora muestra instalaciones más limpias y cómodas. Del circuito de 4.2 km, 1,600 metros eran de ascenso, lo cual supuso un desafío para más de uno de los pequeños participantes, pero todos lograron superarlo sin lugar a dudas. Todas las categorías fueron del agrado de los asistentes, destacándose la participación nutrida en las categorías de 13 y 14 años, tanto en hombres como en mujeres. Tal vez este circuito sea el más exigente de los tres que conformaban el programa, pero los pequeñines lo afrontaron con valentía y mucho esfuerzo.
ETAPA 3: Parque Tangamanga 2
Para la tercera etapa, el parque Tangamanga 2 engalanó la fiesta con una pista sumamente interesante.
Los participantes corrieron en el autódromo San Luis 400, en un circuito de 1,600 metros. El asfalto en óptimas condiciones permitió que la velocidad en las diferentes categorías fuera alta. Desde los más pequeños hasta los mayores, se podía notar en sus rostros la satisfacción por haber llegado hasta la última etapa.
En algunas ocasiones, la competencia fue equilibrada, mientras que en otras se notó la diferencia entre los participantes. No obstante, lo más importante fue que todos corrieron con el único fin de divertirse y dar su máximo esfuerzo. Desde temprano, desfilaron las categorías en un día soleado que no dio tregua.
Así fue como, al iniciar la tarde, la bandera a cuadros se agitó por última vez, dando paso a la ceremonia de premiación final.
Los ganadores se hicieron acreedores a su medalla, suéter de campeón y premios de los patrocinadores. Además, todos los participantes recibieron el aplauso y reconocimiento, y una generosa bolsa de dulces.
Por primera vez en este evento, se incluyó una categoría especial, dividida en «Especial Menores» y «Especial Mayores», con 2 y 3 competidores respectivamente.
Ya son seis ediciones de este evento, y podemos observar la evolución que ha tenido: una mejor organización, más patrocinadores, una logística mejor planificada y una mayor asistencia tanto de participantes como del público en general.
Sin lugar a dudas, Junior Bike promete una edición aún mejor para el próximo año.